Radiografía de… Hoyeon Jung

una mujer vestida con una chaqueta azul y pantalones.

Con la actriz protagonista de la serie ‘El juego del calamar’ inauguramos esta sección del blog.

Elegimos a una persona que nos encanta al equipo y nos la imaginamos en nuestra ciudad, Madrid.

Además de proponerle algún retoque capilar (siempre según nuestro punto de vista) y algunas alternativas de cuidados estéticos, ¿qué le recomendaríamos? Esto es todo lo que aconsejaríamos a Jung para este otoño vibrante.

Intervendríamos (no mucho) esa melena

Nos rechifla su “short wolf cut”, es uno de nuestros cortes de pelo favoritos, y a ella le sienta de cine.

¿Su traducción? Algo así como “corte de lobo”, quizá por el desfilado y entrescado extremo y porque las puntas se disparan como si nunca se hubieran peinado, lo que le da un aire bastante asalvajado.

¿Que qué le haríamos? Aunque tenemos que decir “¡chapeau!” a su peluquero, los ángulos de su cara aceptarían de maravilla un pelín más longitud y un toque convexo, es decir, un poco más corto en la nuca que en las patillas.

También le aclararíamos un tono o dos las puntas, sobre todo las que se acercan a su rostro. ¿La técnica? Con pincel, please.

Doble limpieza coreana y frío en los ojos

Sí, Jung, el equipo Ángela Navarro apuesta cual jugador del Juego del Calamar y nos jugamos las cartas porque seguro que nuestra diva coreana pone en práctica la doble limpieza asiática (en agua y en aceite, más info aquí).

Pero si no fuera así, su piel tendría muchísima más luminosidad. Y, por rizar el rizo, porque le damos un 10, le aconsejamos guardar su contorno de ojos en la nevera ( el nuestro de la línea ADAPTA le iría genial).

El menú que ella elija

Un pajarito nos ha soplado que el Bonjuk y bibimbap (Fernán González, 4) es el mejor coreano de Madrid y en el que se puede degustar la comida más auténtica.

Nos gustaría llevarnos a Jung a comer allí para que nos recomendara sus platos favoritos y nos contara si el pollo picante o el tteokbokki que hacen se parecen de verdad a los que comía ella de pequeña.

Cargo y tacón

Nos imaginamos a Jung con unos pantalones cargo – que por cierto, vuelven “a la carga” (guiño, guiño) – ¡¡pero con taconazo!! Seguro que a ella también le encantan los contrastes, porque los elementos se quitan seriedad entre ellos su los mezclas bien.

Un pantalón cargo te hace más femenina, porque nada lo hay más que darte un toque masculino. A Jung le encantaría el corte de los que hace Pernille Teisbaek y los de Balenciaga.

¿Le gustará el K-Pop?

Le recomendamos un vistacito a la librería coreana Liang You. Además de material escolar coreano divertidísimo, en este local de la calle Leganitos, 22 podría encontrar miles de objetos de merchandising de los artistas favoritos del K-Pop.

Y de allí, nos la llevaríamos al Independance Club (Atocha, 127) a bailar… K-Pop, por supuesto.

Elogio de la luz

Fundación Telefónica nunca defrauda. Sus programadores están haciendo un gran esfuerzo por acercar temas variados, de interés general y difíciles de abordar, como la situación del Amazonas o los últimos avances en impresiones 3D.

La última delicia que hemos visto allí ha sido Color. El conocimiento de lo invisible. un recorrido por la influencia que han tenido las diferentes longitudes de onda en la ciencia y la sociedad, el arte y la economía.

¡Súper interesante! Podríamos llevar allí a Jung hasta el 9 de enero.

Y para cenar… Mayte revisitada

El que fue icónico restaurante en los años setenta y ochenta en Madrid, el Mayte Commodore, se ha convertido ahora en el place to be de Madrid. Se llama Commodore Madrid, y su resurrección la ha ideado el grupo Casa Remigio.

Las alcachofas confitadas con huevo a baja temperatura y tapenade, o su fabulosa tarta de queso al horno merecen ser escenario de una de tus primeras citas del otoño.

Como los cocktails. El “Maytini” lleva ginebra, vermú blanco y frambuesa y es una maravilla.

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