Hoy por hoy, en plena era tecnológica, estamos tan acostumbradas a encontrar soluciones que no ponemos nada en tela de juicio. No dudamos, compramos algo, sobre todo si está bien argumentado, lo aplicamos, y santas pascuas.
Pero muchas veces no nos preguntamos por qué algo funciona. Hoy te hablamos de uno de nuestros temazos favoritos, que son los champús de tratamiento, los que te ayudan cuando tu cabello no se comporta de manera normal.
O sea, hablamos de cuando tienes grasa, o caspa, o el cuero cabelludo irritado, o necesitas dar potencia a tu color… ¿Te has preguntado qué hacen los activos de los champús en tu cuero cabelludo? Hoy te vamos a hablar de la caspa, porque este es su mes favorito:
Incómoda a rabiar
Es la más enervante de todas las afecciones capilares porque pica, escuece, y además tiñe tus hombros de blanco… ¡glup!
Su nombre científico es pitiriasis, y es un problema capilar que tiene una incidencia del 50% en la población adulta de todo el mundo. No tiene nada que ver con la higiene sino con el estilo de vida, el estrés (mucho) y una alimentación inadecuada.
Hacemos hincapié en el estrés porque la tensión mantenida en el tiempo provoca un estado de rigidez que incluye al cuero cabelludo y que hace disminuir el calibre de los vasos sanguíneos que lo nutren.
Si disminuye la vascularización, llegan menos nutrientes al folículo piloso, y por ende al cabello. Y se altera el cuero cabelludo porque hay una alteración de las glándulas sebáceas.
Así, la renovación celular, que en condiciones normales se produce cada 28 días, se desequilibra y se puede hacer más frecuente.
Esto aumenta la tendencia a la dermatitis o al exceso de caspa. Las glándulas sebáceas se hacen menos activas, lo que se traduce en un cuero cabelludo y un pelo más deshidratado.
Esta afección también puede tener que ver con los cambios hormonales, y puede producirse en las cejas y las aletas de la nariz. Su aparición aumenta en primavera y verano, porque la humedad y el calor la favorecen.
Por último, la caspa también puede aparecer por la influencia de un hongo llamado ‘Malassezia’, que acelera la renovación celular del cuero cabelludo hasta que acaba descontrolándose.
Los activos infalibles…
Generalmente, los champús anticaspa incluyen ingredientes tónicos y refrescantes con el fin de ahuyentar la descamación y aportar algo de confort.
Pero sobre todo, zinc, porque ataca directamente al ‘Malassezia’. Además, tu champú debe incluir, por ejemplo, alfahidroxiácidos para normalizar la renovación celular, y activos antiinflamatorios como el romero o el áloe vera.
Te recordamos que en Ángela Navarro contamos con la rutina capilar ADAPTA anticaspa compuesta de un champú, un acondicionador y un tratamiento personalizable al que añadir una ampolla S.O.S. anticaspa y otra anti-irritación.
Y sobre todo, sé persistente con el tratamiento. Cuando apliques la segunda champunada, déjalo actuar unos 5 minutos. Y aplica después el tratamiento capilar.
¡Y más consejos!
- Exfolia tu cuero cabelludo una vez al mes para controlar su renovación celular. Puedes utilizar nuestro exfoliante de la línea ADAPTA, con aplicación para rostro cuerpo, pero también para el cabello.
- Evita los cepillados agresivos, el aire del secador demasiado caliente, los productos con un pH muy ácido y el uso de sombreros o viseras para que respire con normalidad.
- Y si vas a la piscina, utiliza un gorro y aclara siempre con agua dulce inmediatamente después de salir del agua clorada.
Nuestra promo es perfecta…
Esta semana tenemos una muy buena noticia que darte: hasta el 31 de mayo, por cada compra superior a 60 euros en productos capilares (incluidas las minitallas, perfectas para las vacaciones) te regalamos un masajeador capilar.
Este masajeador conseguirá reactivar tu circulación porque es capaz de llegar a más lugares que con solo tus diez dedos de la mano. La forma de sus púas ayuda a limpiar en profundidad si lo utilizas junto al champú, y a hacer penetrar cualquier tratamiento.
Esta temporada, la caspa huirá despavorida de tu cabeza.