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¿Eres adicta al móvil?

¿Eres adicta al móvil?

Si estás leyendo esto, es que querrías pasar menos tiempo frente al móvil.

¿Adicta yo? ¿Qué móvil?

El móvil es la heroína del siglo XXI. ¿Crees que eres adicta al móvil? Según un estudio encargado por Multiópticas, lo primero y lo último que hacemos a diario el 80% de nosotras es mirar el móvil. Y muchas, por la mañana, antes siquiera de levantarse de la cama.

Y eso, a pesar de que tres de cada cuatro personas asume que el tiempo que pasa delante de una pantalla podría causarles problemas de visión, y de que seis de cada diez individuos reconoce que el uso del smartphone ha afectado a su concentración.

Vivimos en pleno buffet libre de pantallas, y gestionar este hábito se está convirtiendo en un problema.

Y si no, piensa, ¿te has olvidado alguna vez el móvil en casa? ¿y cuál ha sido tu reacción? Si ha sido volar de vuelta a casa a buscarlo, entendemos que aún sigas leyendo.

Pautas para un détox digital

Aunque cada una según su estilo de vida debe de encontrar su manera de gestionar esta desintoxicación, porque lo es, te damos unos consejos generales que podrían servir para que dejes de ser adicta al móvil.

Monitoriza. Antes de comenzar tu apuesta, para que no haya paso atrás, dedica un día a anotar en un block cada vez que miras la pantalla para ver si tienes nuevo correo, mensajes de whatsapp o notificaciones de cualquiera de tus aplicaciones.

Te aseguramos que el resultado podría ser peor de lo que imaginas, así que te recomendamos prepararte.

Toma la decisión. Elige la fecha en la que iniciarás tu détox. Hora y día. Y anótalo en varios lugares visible como el frigorífico, el cabecero de la cama o el espejo del cuarto de baño.

Además, díselo a tu familia y conocidos. Si tienes la tentación de saltarte tu compromiso contigo misma, al menos te avergonzará hacerlo con los tuyos y eso te empujará con fuerza a cumplir tu desafío.

Compra un despertador. Así podrás dejar el móvil fuera de la habitación, y eso te alejará de la tentación. Al menos por la mañana.

Con horario

Márcate horarios para conectarte. Por ejemplo, cada vez que termines una tarea o varias que te lleven al menos un par de horas. Así además “educarás” a las personas con las que interactúas y no esperarán de ti una respuesta inmediata.

O bien puedes desactivar las notificaciones y poder tener tu móvil a mano pero sin tenerlo a la vista por si es algo importante o urgente. Entonces, no te preocupes, que te llamarán por teléfono.

Guárdalo con otros. Acostúmbrate a tenerlo guardado siempre que estés en una reunión, un almuerzo o una cita con otra persona. Darás, además, una imagen excelente. La de alguien que no es esclava de su teléfono móvil, porque será la verdad.

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